Dassaev Téllez Adame / Fotos: Dassaev Téllez
Chilpancingo, Guerrero
Impulsado solo por la iniciativa ciudadana, en la localidad de Petaquillas, perteneciente al municipio de Chilpancingo, se realizó el primer torneo de canicas, donde se jugó con las reglas básicas del «rombo» y se busca rescatar los tradicionales juegos mexicanos.
En este torneo, se contó con la participación de 13 menores de edad, 10 adolescentes y 9 adultos; además de decenas de pobladores de esta localidad, quienes se divirtieron y aplaudieron esta gran iniciativa.
A todos los participantes, no se les pidió cuota de inscripción o recuperación, tan solo se les pedía llevar un mínimo de 40 canicas de 17mm, quienes se dividirían en grupos 4 personas para jugar a eliminación directa con las reglas básicas de “rombo”.
Las categorías fueron principiantes, que eran menores de edad y que no importaba si conocían o no las reglas, ya que se les irían explicando durante el desarrollo del juego; y la categoría de avanzados, donde se enrolaron jóvenes y adultos, estos últimos recordando los tiempos en que jugaban con sus “palomillas” en esta localidad de Chilpancingo.
Dicho evento se realizó gracias a la organización del comité autonombrado “Coñes, Ciroles y su banda de chavo rucos”, quienes están organizándose para rescatar costumbres, juegos y tradiciones mexicanas que están quedando en el olvido, como lo es el juego de canicas.
Este torneo se realizó dentro del ruedo de la pequeña plaza de toros de esta población, la cual se ubica a un costado de la carretera federal México-Acapulco, a tan solo 5 minutos de la capital del estado de Guerrero.
En declaraciones, el integrante del grupo de “Los Chavo rucos”, Joel Villalba Flores, conocido como “El Cirol”, dijo que uno de los principales objetivos de esta organización es que los jóvenes y niños dejen a un lado el uso del teléfono celular, o por lo menos se disminuya su uso.
Cosa que lograron por más de 4 horas, tiempo en que duraron los torneos.
Otro de los “Chavo rucos”, Antonio “El Coñe” Espinoza Godínez, aplaudió la participación de los menores, que estuvieron acompañados por sus familias y vecinos del lugar, quienes no solo disfrutaron de este tradicional juego mexicano, sino que también recordaron sus momentos de infancia.
Indico que los premios, los cuales fueron en efectivo y algunos juguetes, se dio gracias a la cooperación de vecinos, comerciantes y patrocinadores, quienes se han concretado en una especie de cooperativa para seguir apoyando este tipo de eventos.
Cabe resaltar que, en el pasado mes de febrero, también llevaron a cabo un concurso de papalotes, en sus modalidades “tradicional y moderno”, pero también se busca rescatar los juegos de trompo y yoyo, así como las tradiciones de esta localidad, como el recorrido del 31 de diciembre conocido como “recorrido de botes viejos”.
Por lo que adelantaron que en próximas fechas anunciaran las demás actividades; al finalizar el torneo, gracias a la cooperación de los patrocinadores, se realizó una convivencia con los participantes, a quienes les pidieron no olvidar este tipo de juegos tradicionales.
