Redacción /
Zapopan, Jalisco
Para algunas personas llegar a estar entre los mejores del mundo es un gran anhelo. Trabajan día a día para ello, pero cuando alcanzan el objetivo, no lo gozan como lo habían imaginado.
Algo parecido le ocurrió a la griega Maria Sakkari, quien se encuentra en Guadalajara para disputar el último certamen WTA 1000 de la temporada.
En un ejercicio de honestidad, Sakkari admitió hace un par de meses que no estaba disfrutando tanto ubicarse entre las mejores del mundo. Tal vez por ello menciona que su mayor aprendizaje a lo largo de estos años es que no debe exigirse tanto.
«Creo que no hay que poner demasiada presión como hice este año, felicitarme por muchas cosas que he logrado y tratar de ser tan agradable como pueda». Se refiere a ser amable consigo misma y entender que siempre habrá altibajos.
De la mano va tener claro que la palabra éxito puede tener diferentes significados. «Para mí el éxito es muchas cosas, tiene que ver con las emociones, todo en lo que encuentro satisfacción, cuando gano un gran partido, o estoy en una etapa final en un torneo, pero también ser feliz y buena conmigo misma», comentó.
El año pasado fue histórico para la griega, quien ganó el derecho de jugar las WTA Finals, que se realizaron en la Perla Tapatía, por colocarse entre las ocho mejores del mundo. Terminó la temporada en el sitio seis del ranking de la WTA, convirtiéndose en la primera jugadora de su país en alcanzar el top ten.
También fue la primera griega que clasifica a las WTA Finals (llegó a semifinales), alcanzó su tercera final de un certamen WTA y llegó a las semifinales de Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos, dejando a su paso a tres top 20 en ambos eventos.
Además se anotó el mayor número de triunfos sobre jugadoras top 10 (9). Curiosamente, no cosechó algún título, aunque el crecimiento que ha tenido es evidente, porque mantenerse en el top ten es un logro. Maria analiza los principales cambios que ve entre la jugadora que es hoy y la de hace unos años.
«Creo que el principal cambio es la consistencia, creer, ser más valiente muchas veces dentro de la cancha y tratar de ir por las cosas que no iba antes», explica Sakkari.
Maria va por un gran cierre de la temporada que le permita disputar por segundo año consecutivo las WTA Finals, lo que logrará si hoy vence en su duelo de segunda ronda a la ucraniana Marta Kostyuk.
